Un estudio analizó a más de 2.800 personas durante un mes para conocer los efectos positivos de dejar de usar la red social.
La hipótesis de los investigadores es que al no utilizar Facebook, los usuarios tendrían oportunidad de desconectarse y socializar con la familia o amigos. De igual modo se reducirían problemas como adicción, depresión y polarización política.
El uso de otras redes sociales también se redujo y al término del experimento no existió una urgencia por regresar a la rutina anterior.
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